Las modas literarias monotemáticas y mi lista de deseados

Hojeando una revista (pasando las páginas) ojeé (calé) unos cuantos libritos muy interesantes. Creo que estas Navidades los Reyes vendrán cargaditos de libros.

Vi en la tele una entrevista a un historiador y escritor de novelas históricas, no me acuerdo de su nombre, que contaba cómo se llevaban entre los autores de este género y que había contacto y amistad entre ellos. Una de las anécdotas era que entre ellos se recomendaban temas para hacer novelas sobre si tal fecha es el aniversario de tal o cual y así hacer la novela. En ese momento caí en la cuenta de la moda monotemática a la hora de publicar libros.

Lo mismo pasa en las películas. Ahora está de moda hacer en película los héroes de cómics clásicos. También está la de los remakes de películas antiguas (léase Conan, miedo me da, a ver qué sale) o de películas modernas (léase Spiderman, si funcionan sus películas ¿porqué empiezan de cero otra vez?)

En novela histórica y de ficción que es lo que más me interesa también está “la moda”. Que si sale Harry Potter y vende un montón, pues ahí tenemos toda la retahíla de niños con varitas. Que si el bluff de la saga Millennium de Stieg Larsson, hala, autores suecos por un tubo. Hubo este verano la moda de los infectados (que no zombis) y bueno, fin del mundo por un tubo. También más o menos seis meses para arriba seis meses para abajo hubo bastantes novelas históricas de la edad media en España. Y ahora en el presente tenemos un sin fin literatura sobre el siglo XX, más que novelas sobre la Segunda Guerra Mundial, son sobre golpes de estado, revoluciones, totalitarismos y demás.

Pero hoy me he fijado en otra cosa, la ingente cantidad de féminas de las letras que están copando los tops literarios. ¿Será moda? ¿Coincidencia? ¿Más listas y publican un género más comercial? No sé, ojeando las novedades hay un montón de ellas.

A todo esto, enhorabuena a Ana María Matute por su Premio Cervantes 2010 donde una de sus obras la tengo repe porque me empané con Olvidado Rey Gudu. Y un montón de puntos menos, a la editorial (no a la autora) de Matilde Asensi y su última novela Venganza en Sevilla, donde continúa narrando las aventuras de Martín Nevares que empezaron con la novela Tierra Firme. El libro lo han divido en dos, seguro, porque el final no se cierra y así la editorial gana el doble. De esta autora tengo todas sus novelas, son muy entretenidas y divertidas.

Y ahora va mi lista de los Reyes Magos:

• Umberto Eco, El cementerio de Praga, a ver qué nos trae este autor, espero que sea fácil de leer.
• Kenn Follet, La caída de los Gigantes, este libro ya lo tengo, pero lo pongo aquí para acordarme de leerlo. Es un ladrillo de libro, en sentido literal. Mira que el libro de Julia Navarro, Dime quién soy tiene las mismas páginas pero pesa menos. Otro ladrillo es su novela Un mundo sin fin, aquí sí que es en sentido literal y literario, no pasé de las 100 primeras páginas... buag, que cosa más aburrida.
• Eduardo Punset, Viaje a las emociones, nuestro Eduardo es como de la familia
• Eduardo Mendoza, Riña de Gatos, Premio Planeta 2010. No me gusta este premio, sus novelas ganadoras pueden ser verdaderos bodrios. Pero es que la novela tiene buena pinta.
• Almudena Grandes, Inés y la alegría, otra de la Postguerra española y la Guerra Mundial, como la de Julia Navarro. Vamos a ver qué tal es que de esta autora no he leído nada.
• María Dueñas, El tiempo entre costuras, otra de guerras y mujeres como protagonista.

Hay más en mi lista pero los dineros...

Lo ideal es lo que hemos hecho más de una vez: viaje a Madrid, visitar tropecientas librerías, comprar una maleta y llenarla. Como diría Arguiñano “una gozada”.